viernes, 5 de noviembre de 2010

A vista de Himalaya

El viaje a Manali fue algo accidentado. El autobús es el único medio disponible para llegar a este pueblo de montaña situado a unos 2.050 m de altitud. Decidimos hacer el trayecto por la noche, para no perder tiempo. Se suponía que llegábamos sobre las 8 de la mañana, pero en un alarde de conducción temeraria del chófer por las sinuosas y estrechas carreteras típicas de este país, ¡¡nos plantamos en Manali a las 6 y cuarto!!. Todavía con el miedo en el cuerpo, salimos de la estación, y mientras decidíamos dónde nos quedábamos,  nos anduvimos calentando a la vera de una hoguera que había en medio de la calle. Teníamos pensado quedarnos 2 noches, y tres días.


En la primera jornada nos instalamos y aprovechamos la tarde para visitar alguno de los numerosos mercados que inundan el pueblo. Encontramos alguna que otra ganga que parecía de buena calidad, aunque no dudo que al igual que en Shimla, fueran de dudosa procedencia. También estuvimos informándonos y preparando la ruta que teníamos pensado hacer el segundo día. Nos costó decidirnos, por el poco tiempo del que disponíamos y por las infinitas posiblidades de este enclave montañoso. Al final estaba claro, íbamos a subir al Rohtang Pass (Paso de Rohtang).

Nos levantamos muy temprano y cogimos un autobús hasta la vecina Koti, donde después de un maravilloso desayuno a base de café y chana batura (algo parecido al poori que tanto me gusta), comenzamos la caminata. No sé decir exactamente cuántos kilómetros andamos, porque al poco después de empezar, dejamos la carretera, a la derecha (que subía la montaña haciendo unos eses que ni en el Tour de Francia), y tomamos un sendero que se perdía y aparecía constantemente, así que los cálculos sólo puedo hacerlos en horas. Tardamos unas cuatro horas en llegar al poblado de Marhi (11.200 pies, unos 3.390 metros), y tras un refrigerio de una media hora, partimos a nuestro destino final, para entre una cosa y otra llegar allí como a las 16.30 h. (Rohtang Pass, 13.052 pies, unos 3.950 metros). Recuerdo bien la hora porque nos sorprendió que siendo tan temprano, estuviera oscureciendo tan rápido; además, el último autobús de vuelta a Manali pasaba por allí a eso de las 17.00 h.


Aquí os presento a Agra, la perra que estuvo acompañándonos durante un buen trozo de la subida. Era super dócil, pero no le dimos mucha bola, porque aquí con los perros hay que tener cuidado. ¡¡A saber la de cosas que te pueden contagiar, XD!!.


Y algunos pensaréis, y ¿¿que es eso del Rohtang Pass, que hay allí?? Pues siento decepcionaros, pero simplemente es un puerto de montaña; es decir, el punto más alto al que se llega por el camino que va hacia Leh (antigua capital del reino de Ladakh, actualmente en el estado de Jammu y Cachemira), y que digo yo que será una carretera nacional (por llamarla de alguna forma, porque está casi sin asfaltar y con unos socavones enormes debidos a los continuos desprendimientos de roca). En las guías de viaje se puede leer que el Rohtang Pass toma su nombre del Rohtang La, montaña cercana que significa literalmente montón de cadáveres, en referencia a los cientos de viajeros que han muerto congelados aquí. También se comenta en la Lonely que muchos turistas indios vienen a pasar el día desde Manali para gozar de su primer contacto con la nieve, pero no os creáis que vienen a andar y a disfrutar del aire puro, sino que van a todo tren en unos todoterrenos enormes y disfrutando del paisaje. De hecho, sólo estábamos haciendo esa ruta a pie unos pastores de cabras y nosotros. Yo creo que los turistas indios estaban alucinados de que gente blanquita no tuviera dinero suficiente para no ir andando; creo que el concepto de turismo rural todavía no ha tomado mucha fuerza por aquí, XD. Las instantáneas son espectaculares, y se quedan cortas al intentar enseñar la belleza de un entorno respaldado por la cordillera del Himalaya; ¡¡casi se podía tocar con las manos!! 

El autobús de vuelta a Manali quedará en nuestro viaje como uno de los momentos más agobiantes, paranoicos y divertidos. En un trayecto de unos 56 kilómetros, tadamos la friolera de 4 horas, todo gracias a una carretera, en pésimas condiciones, que era simplemente inexistente en muchos momentos. Fuimos casi todo el tiempo de pie, apiñados en el pasillo del autobús y con no sé cuántos indios que sólo hacían mirarnos y reírse.


El último día, dado el cansancio que teníamos, decidimos quedarnos paseando por Manali. Eso sí, no un paseo cualquiera, sino un paseo al más puro estilo indio (y no estoy hablando de andar descalzo, mascar tabaco y escupir mientras tiras papeles al suelo), un paseo en una Royal Enfield. En nuestra vida habíamos conducido ninguno motos de marchas, pero por supuesto dijimos en la tienda que éramos unos expertos (algo que dejaron de creerse cuando vieron que no éramos capaces ni de arrancar la moto a pedal). Por lo que me contaron unos chicos de Almería que nos encontramos allí, en la India las motos tienen el pedal de las marchas en el lado contrario que en España (aquí es el derecho y allí es al revés, creo), pero evidentemente a mí era un dato que no me decía mucho, porque sin haber cambiado nunca las marchas de una moto, ¿¿cómo me iba a preocupar el que estuvieran en el lado contrario??. De las cosas más importantes que aprendí ese día fue a usar el pedal del freno y no sólo el de la maneta,ya que de ir en bici estoy acostumbrado a que el freno esté en el manillar, únicamente. De los cascos mejor no hablamos, porque además de no ser obligatorio aquí en la India (o de no ser sancionados los infractores, por la policía), los que nos dieron hacían de todo menos proteger; más bien yo creo que eran hasta peligrosos. Las fotos no tienen desperdicio, pero las sensaciones son simplemente indescriptibles. Deseando estoy de volver a España y pillarme una, jaja.


Esa misma tarde cogimos un autobús de vuelta a Delhi y de allí, volamos seguidamente a Varanasi (Benarés), donde comenzábamos una segunda parte del viaje más espiritual. Ya os iré contando. Por cierto, un truquito: si pincháis en las fotos, las podréis ver en grande.


Un abrazo, Pablo L.

14 comentarios:

  1. Hola Pablo, pedazo de caminata que os disteis en este viaje, pero por las fotos veo que seguro mereció la pena, el paisaje debe ser magnifico, por otro lado observo que tu bigote ha pasado de ser un desfile de hormigas a un incipiente mostacho.
    Cuídate mucho y sigue disfrutando
    Saludos de E. Garófano.

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  2. Hombre Enrique, ya no sólo te veo muy suelto con la tecnología, sino que además te estás convirtiendo en un seguidor de los buenos, de los que están ahí esperando que publique algo, jaja, te felicito y me congratulo. La caminata fue cosa fina, y el problema es que no había bocatas de chorizo para la hora de comer, pero bueno, desde luego que mereció la pena. Muchas gracias.

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  3. Por favor, aun me acuerdo de la vuelta en autobus,k palizon,pero sin niguna duda lo mejor de ese viaje fue el tio del conejoooo.......jajaja...y la Royal Enfield lo mejor...k guapas k estaban ,verdad??, y k bien se le daba al señor Pol conducirla...jajaja..
    Por cierto, mis coleguitas indios,me he pillao del carrefour un chickent tandoori k te viene ya preparao, con su arroz pilau y su panes naan , ya os comento como esta,...un beso...La karmelilla.

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  4. Muchas gracias Carmela; lo cierto es que le cogí el rollo a la máquina, aunque costó. No veo el momento de volver a pillar una; quizás ahora para cuando venga mi hermana (cuando decida venir), volvamos a probar, jaja. Ya me dirás si la comida India made in Europe pica ni la mitad que la de aquí. Un besote.

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  5. Pablito, no te desespere que el paquetito solo se va a demorar unos días, paciencia que en la espera llegara la recompensa.
    Un fuerte abrazo de E.Garófano.

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  6. Muchas gracias Enrique, por tenerme informado. Por eso voy a dejarle a mi hermana venir, porque trae el paquete, después de to' lo que se ha liao', jaja. Un abrazo y ya te contaré!!

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  7. Illooooooooooo!!!
    Vaya chulada de viajes que te estás pegando!! Me encanta meterme en tu blog y ver tus fotos y lo que escribes,jejeje. Joder macho vaya vistas teníais que tener desde allí a lo alto.
    Que sigas disfrutando a jierro y que te vayan las cosas genial.
    Un abrazo!!
    PD:Por cierto.....perdona por no haberte felicitado en su día, estaba de viaje y despues se me pasó!!!
    PARABÉNS FELICIDADES!!

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  8. Muchas gracias artista!! Yo también bicheo tu blog y veo lo bien que te lo pasas. Mis paisajes serán cosa fina, pero tus fiestas de barbacoa y cachaça no se quedan atrás, mamón!! Espero que nos sigas deleitando con tu dialéctica y tus aventuras. Un abrazo!!

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  9. Jooooooooooooo!! Que recuerdazos llegan con las fotos y tus post!! La verdad es que para mi esta parte del viaje fue de las mejores, tanto por ver el encanto de los pueblos de montañita en plena naturaleza,por la rutaza y además el día moto fue el broche final!!
    Que envidia me das con el nuevo viaje, que aunque con vicisitudes lo vas a pasar de arte otra vez seguro!!(y ya con paquete ni te cuento!!)

    Un besazo!
    La reportera fotográfica oficial del post! juas juas juas

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  10. Jaja, la verdad es que sí que esta parte fue de las mejores, aunque lo de después tampoco se quedó atrás.
    Por cierto, a reseñar que lo de la fotógrafa oficial es una vil falacia, ya que aunque es cierto que algunas son tuyas, la mayoría son de mi propia cosecha, que yo soy muy artístico en la fotografía!!! XD. Un besote.

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  11. Supongo que con el olorcillo de los lomos no te habrá dado ningún mareíllo, espero que lo disfrute y si lo comparte que sea con un personal que tenga las mismas carencias que tu y realmente sepa apreciar lo que se echa de menos estas cosas, sobre todo cuando se está por sitios raros, lo digo por los turistas que te lo llevaron, que seguro que de estos productos tienes las pilas llenas de momento, pues no sé si por el tiempo que estarán por allí , puedan empezar a tener el mono de cositas buenas e hinchárseles las lenguas de tanto picante.
    Bueno chaval disfruta y pásatelo bien, un brazo de E.Garófano.

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  12. Querido Pablo,
    !Cómo me ha emocionado ver las foticas de las montañas nevadas y esas rutitas tan chulas.
    Me están poniendo los dientes largos, menos mal que ya me falta poco para Benamahoma, y aunque no tiene mucho que ver ni en altura ni en verdor, a mi me basta y me encanta ya que todos los años nos pegamos nuestros buenos paseos por esta sierra tan espectacular que tenemos,aunque solo tenga mil y pico de metros.
    Por cierto ya nos hemos enterado de la odisea de Marta.
    A estas alturas ya estareis juntos y pasándolo bien.
    Ya nos contareis vuestras peripecias.
    Un beso muy fuerte de todos.

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  13. Querido Enrique, ayer llegué de vuelta del viaje con mi hermana y ya hubo degustación de lomo con el personal Erasmus de la residencia. Tenías que ver las caras de la gente, algunos estaban hasta emocionados; ya sabes, este tipo de manjares no son muy comunes por aquí, pero tampoco en sus países de origen. Un abrazo y ya contaré más cositas!!

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  14. Hola tita, estoy seguro que tú eres de las que más hubiera disfrutado en esa subidita que nos pegamos cerquita del Himalaya. Lógicamente, la belleza de este sitio cobrá más valor aun cuando se dice la altura a la que está, pero no te creas que la Sierra de Cádiz tiene nada que envidiarle a esta zona a la que fuimos. Espero que Benamahoma te dé la energía que esperas. Un besote y ya os sigo contando, que se me acumula el trabajo, jaj!!

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