martes, 19 de octubre de 2010

Primeros pasos en el Norte: Chandigarh

Dichosos los ojos, que diría mi madre. El pasado domingo llegué de vuelta del viaje de dos semanas que me he pegado por el norte de la India, y a pesar de que estaba deseando contar mil anécdotas en el blog, he vuelto realmente exhausto, así que una vez descansado, paso a contaros algunas batallitas del viaje; lo haré como los coleccionables de las revistas, por fascículos, que si no el post se me va de las manos y se vuelve infumable, XD.

El día 2 de octubre, a las 7 de la mañana cogimos (mi compañero Ricardo y yo) el vuelo con destino Delhi. Volamos con SpiceJet, que significa algo así como Jet Picante, porque aquí en la India, hasta las aerolíneas pican. Durante ese día, estuvimos conociendo Nueva Delhi, un barrio de Delhi, donde se concentran una gran cantidad de tiendas y mercadillos pensados por y para los turistas, y donde el regateo es una religión; podría asegurar que hasta los propios vendedores no se quedan totalmente satisfechos después de una venta, si no han discutido previamente con el comprador, aunque esto le suponga obtener menos beneficio.

Al día siguiente, muy temprano fuimos al aeropuerto a recoger a nuestras visitas españolas y cogimos un tren a nuestra primera parada: Chandigarh. La ciudad de Chandigarh se encuentra en la frontera entre los estados de Punjab y Haryana, y hace las veces de capital de ambos territorios, aunque no pertenece a ninguno de ellos. ¿Por qué tan curiosa circunstancia? Resulta que cuando la India alcanzó su independencia, el Gobierno central decidió "crear" una ciudad y diseñarla como "expresión de la fe de la nación en el futuro"; el encargo recayó en el arquitecto de origen suizo Le Corbusier, que proyectó una utopía vanguardista en la que reinan "la aritmética, los elementos modulares y la geometría". Así que mirar el mapa de la ciudad de Chandigarh es como observar un tablero de ajedrez, porque el territorio está dividido en distritos de formas rectangular o cuadrada; vamos, que es como si lo hubieran diseñado a escuadra y cartabón. Es totalmente distinta a las ciudades que he visitado por aquí, y sorprende ver entre tanto caos un proyecto de ciudad tan sumamente ordenada y hasta limpia.

De nuestro día y pico aquí he de destacar el Jardín de piedra de Nek Chand. Este refugiado indio pasó los últimos años de la ocupación británica en Pakistán; en el año 1948, cruzó  la frontera y se instaló en Chandigarh, donde quedó impatctado por la cantidad de residuos generados al arrasar aldeas para la construcción de la ciudad. Chand recuperó todo ese material, se lo llevó a su hogar en la selva y le dio una segundo vida como material escultórico. Acabó creando miles de formas hechas con residuos urbanos e industriales, así como piedra local. Años más tarde, unos funcionarios gubernamentales descubrieron su obra y poco después, se creó el parque que a día de hoy es una de las atracciones más visitadas de toda la India. Como veis, la cantidad de figuras y formas es impresionante; destacan además las zonas con paredes enteras forradas con trozos de platos, vasijas de barro hechas añicos y hasta con ladrones de enchufes. El parque es enorme, cosa normal, porque la materia prima usada nunca escasea, jaja.


No quería finalizar este post sin hacer una mención especial a mis visitas, sin las que hubiera sido imposible haber tenido un viaje tan excepcional. Además, me han obsequiado con abundantes y variados manjares, de los que estamos dando cuenta yo y gran parte de los Erasmus que estamos en Chennai. Muchas gracias por todo!! Todavía recuerdo las lágrimas que casi se me caen cuando vi el aceite y las galletas Dinosaurio... XD.



Un abrazo, Pablo L.

12 comentarios:

  1. Si te digo que no es envidia lo que tengo ahora, te mentiria...Un abrazo.

    ResponderEliminar
  2. Hombre, normal, es que la mortadela con aceitunas y el salami están muy cotizados, jaja... Gracias por seguirme, crack. Un abrazo!!

    ResponderEliminar
  3. Pedazo de viaje!!! La verdad Luismi es que es para tener envidia, como dice el amo del blog, los sandwiches de mortadela con pan de molde dulzón son incomparables!! Eso sin obviar la compañía de bigote arrocet & cía, jajajajaja!!

    En estos primeros días de Chandirgah y Delhi pudimos descubrir, de primera mano, lo distinta que puede ser una ciudad india de otra, porque aunque todas tienen su tipica basurilla por las calles y sus costumbres indias, Chandigarh es una ciudad verde y bastante organizada y Delhi es un absoluto caos organizativo, solo salvada por estar bastante bien comunicada.

    Bueno, no sigo que voy a reventar próximos posts a bigote!!

    Por cierto, lo del lagrimeo con la comida es verdad... Que alguien le mande un paquete con comida desde España al pobre bigote!! jajajajaja!

    ResponderEliminar
  4. Lo que le diga la rubia bien dicho está, que falta hace que me manden cositas, jaja. Ya me he quitado el mono del embutido de andar por casa con la última visita, para las próximas quiera algo más de calidad...jaja.
    Por cierto, que un parte de los Erasmus que siguen mi blog ya se han quejado de que es mentira eso de que estoy compartiendo el embutido, jaja, así que tendré que tener cuidado con lo que escribo por aquí, que la gente lo pesca todo, XD.

    ResponderEliminar
  5. Hombre Pablo,
    Bienvenido de nuevo al chateo.
    Espero que te hayas quitado ya ese cepillo sin pelos que tenías por bigote, que estás más guapo sin él.
    Me imagino que los exámenes habrán salido bien y que estarás recuperado y dispuesto a seguir en la batalla.
    Seguiremos en contacto y estaremos pendientes de seguir tus historias sobre la India.
    Besos de todos.

    ResponderEliminar
  6. Buenas tita, ya me he quitado el bigote, aunque a diferencia de lo que comentas, me han alabado mucho estos días el que me haya dejado mostacho. Llegaron a decirme que parecía un habitante de Kashmir, fíjate. Los exámenes no han ido mal, aunque todavía espero resultados, pero bueno, ya nos aplicaremos más si hace falta. Espero que todos estéis estupendamente, un besote!!

    ResponderEliminar
  7. Hola Pablo, hace tiempo que no comentaba yo algo aquí, aunque mi seguimiento es fiel. Por cierto, ¿le habrás enseñado a Irene la casita que tienen tus padres allá por la frontera de Nepal?.
    Bueno chaval, iba a decirte que me pidiera cita en la peluquería, pero me temo que no va a ser posible. Un abrazo.

    ResponderEliminar
  8. Hola Antonio, me alegro que acudas fiel a tu cita con el blog, jaja. Ya le enseñé a Irene la casita de Nepal y también el rancho en Rajasthan, lindando con Pakistán, jaja. Es una pena lo del peluquero, porque seguro que nos haría precio de grupo. Un abrazo!!

    ResponderEliminar
  9. Hola palomito: ¡Por fin de vuelta de tu periplo por el norte de La India!. Estoy deseando ver fotos y de escuchar tus vivencias.
    Muy gracioso De La Vega con lo de las casitas. A ver si Hacienda se lo cree y nos buscamos un lio.
    Descansa hasta la próxima visita que llegará en breve.
    Besssssssssssssssossssssssssssssssss.

    ResponderEliminar
  10. Hola guapísima. Ya que el Skype no nos deja hablar, al menos nos quedan los comentarios del blog para saber el uno del otro. Este fin de semana sin falta subo otro capitulito del viaje, que como no me de prisa se me va a juntar con el de la niña, con la que por cierto sigo sin hablar y eso que le escribí un correito ayer... Tranqui con lo de Hacienda, que estar aquí en la India seguro que desgrava, jaja. Un besote.

    ResponderEliminar
  11. Hola Pablo, estas noche vuelvo a intentar mandarte algo haber si por enésima vez puedo hacerlo de forma correcta, me he enterado de buena tinta o como dicen por aquí me lo ha dicho un pajarito, te están preparando un paquetito que no se lo salta ni el tren ese que también describe y transita por las montañas.
    Bueno yo también me he enganchado a tus vivencias comentadas y espero con impaciencia nuevas entregas, como si de una novela por capitulo se tratara.
    Chaval que sigas disfrutando de estas experiencias que por tus relatos se nota que te estás divirtiendo y al mismo tiempo aprendiendo que es lo importante para tu vida.
    Saludos de E. Garófano

    ResponderEliminar
  12. Muchas gracias por participar, Enriquito!! Esta vez llegó el mensaje, así que no desesperes, que acostumbrarse a estas cosas llevan su tiempo. Me he venido arriba cuando he escuchado lo del paquetito, aunque espero que tengan en cuenta que voy a estar 1 semana por ahí cargando con él, jaja. Muchas gracias por seguir mis andanzas, próximamente, más y mejor!! Un abrazo.

    ResponderEliminar